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M.A. GILDEGARD NOEMÍ GRAMAJO GRAMAJO DE ROSALES
1) Toda investigación cuantitativa con método deductivo lleva
hipótesis y desde su inicio se define el alcance del estudio, ya sea
correlacional, explicativo o descriptivo, que intente pronosticar
una cifra o hecho.
2) Toda investigación cualitativa con método inductivo y cuyo
alcance sea exploratorio o descriptivo, no requiere formulación
de hipótesis antes de recolectar datos.
3) Los estudios mixtos pueden tener o no hipótesis, en el enfoque
cuantitativo la tendrán y ocasionalmente en el cualitativo antes
de recolectar datos.
La hipótesis puede ser verdadera o no serlo y puede comprobarse
con hechos; para ello debe tenerse en cuenta que las hipótesis son
explicaciones tentativas y no una afirmación de hecho, ya que de serlo:
una afirmación basada en información antecedente (censos, estudios, fuentes
en general), no se formula hipótesis sino que se afirma un hecho.
Por ejemplo, afirmar que las familias del área rural tienen mayor
cantidad de hijos que las familias del área urbana, ya no constituye una
explicación tentativa porque se trata de un dato estadístico conocido,
comunicado a través del censo poblacional.
Lo mismo sucede si se plantea como hipótesis que “la deficiente
administración de justicia en Guatemala se debe a la desatención de la
población indígena mayoritaria en el conjunto de habitantes del país”.
Esta es una proposición que manifiesta un hecho social evidente que
ha sido informado en estudios realizados, entre otros, por la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos.
Al proponer una hipótesis se desconoce si serán o no verdaderas,
pueden ser generales o precisas e involucrar dos o más variables sujetas
a comprobación empírica: a verificación (si es estudio cuantitativo), y
a observación de campo (si es estudio cualitativo).