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Ruth
Piedrasanta Herrera
Revista Estudios Sociales n.
o
82, ISSN 1409-4819, pp. 79-108
Por tanto, este término, reconocen los autores, suele presentar connota-
ciones negativas.
Todo esto lleva a examinar la definición sobre pobreza, lo cual se hará
un poco más adelante; sin embargo, conviene incluir un inciso que destaque
la importancia de los cambios de contexto social que se produjeron en el
pasado siglo, mientras cada disciplina desarrollaba sus propios métodos y
estrategias de búsqueda.
1.1.1 Los impactos del siglo XX
Durante la primera parte del siglo XX, una serie de eventos conmocionó
a las sociedades en todo el mundo, y ello está relacionado con las dos guerras
mundiales y las graves crisis económicas resentidas (como la Gran Depresión
de 1929), alternadas con ciclos de crecimiento, mientras ocurre la expansión
de la economía capitalista a escala planetaria y las formas alternas –socialistas,
colectivistas– que no lograron contrapesar esta tendencia dentro de un
mundo políticamente polarizado. Asimismo, en el periodo de la posguerra,
pero sobre todo en las décadas del crecimiento de los países desarrollados
(1950-1980) ocurrió un periodo de expansión del capital y se presentó un
gran dinamismo económico, pero en dicho periodo sobresale el desigual
desarrollo económico y social a escala mundial, regional y por país, por lo
que las diferencias socioeconómicas regionales se marcaron más.
Igualmente, en la segunda parte del siglo anterior es cuando, a partir de la
década de 1960, surgen y se desarrollan luchas políticas anticoloniales en busca
de democratizar las formas de Gobierno y también es cuando se va haciendo
presente una serie de cambios sociales, políticos y culturales mayores, como
las luchas por los derechos civiles, las luchas pacifistas, la mayor participación
de mujeres en la vida económica y social, el cambio generacional –los jóvenes
como representantes de nuevos valores–; en este contexto es donde se abren
paso las demandas de movimientos estudiantiles y contraculturales. Este
periodo ha sido señalado por Anthony Giddens, como una nueva etapa de
la modernidad, en la cual las instituciones van a generar un sentimiento de
fragmentación o dispersión, se hacen evidentes las transformaciones en la
percepción de sí mismo y en consecuencia de la intimidad, así como de la
posibilidad de agencia social en relaciones sociales
21
.
Posteriormente, y ya en las últimas décadas del siglo XX, se advierte la
llegada de la globalización como un «proceso que conlleva la homogeneización
del mundo, la creciente importancia de los medios masivos y el desarrollo del
capitalismo y los mercados han hecho posible la conformación de pautas
21
Gina Zabludovsky, Modernidad y Globalización (México: Siglo XXI y UNAM-Facultad
Ciencias Políticas, 2010), 138.