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Las cadenas de valor ¿oportunidades para los más pobres?
Revista Estudios Sociales n.
o
82, ISSN 1409-4819, pp. 27-77
El acceso a mercados es una fortaleza muy importante, puesto que las
distancias a los mercados principales del país son relativamente cortas. Hay
productores que deben recorrer cuatro veces o más estas mismas distancias,
desde otras regiones del país, para llegar a los mismos mercados. Además de
la proximidad geográfica, se cuenta con carreteras en buen estado: la red vial
les es favorable, incluso para llegar a mercados para exportación, el cual es
más exigente y requiere ciertos procesos para certificar la producción y el
producto, así como asumir compromisos con las entregas; pero, a través de
mecanismos asociativos, sería posible gestionar esta opción.
La economía de Sacatepéquez mantiene una intensa actividad turística,
que dinamiza subsectores como hoteles y restaurantes, en Antigua
Guatemala y municipios circunvecinos. Se trata de nichos de consumidores
que se podrían explorar para enlazarlos directamente con los productores.
Si bien muchas veces hay resistencia a comprometer un cultivo, por la
incertidumbre de la cosecha o de los precios, también constituye un reto en
términos de fortalecer capacidades en los productores para relacionarse con
un cliente diferente.
Los servicios de extensión rural constituyen una oportunidad y su
presencia se podría gestionar. Además, sería muy importante atraer la
presencia de universidades como instituciones ajenas a intereses políticos
–que, en la práctica, suelen influir en las entidades gubernamentales– y
con capacidades para diseñar e implementar sistemas de extensión rural
en el territorio, de manera que no se limiten a una mera asistencia técnica
y sectorial, sino trascender a la dimensión territorial y la diversificación
productiva. En otras palabras, conjugar acciones institucionales para
fortalecer los sistemas productivos territoriales.
La misma proximidad geográfica con mercados grandes y con ofertas
de capacitación hace pensar en la posibilidad de ampliar las cadenas y
generar valor en el mismo territorio, por medio de la innovación y creación
de productos. Por ejemplo, productos en conserva, deshidratados y otros
derivados como jaleas y mermeladas.
En el caso del aguacate, un potencial que podría ser aprovechado es la
creación de la marca de territorio. El aguacate del territorio se distingue
de otros y, además, no es una sola variedad. La presentación del producto
difícilmente permite distinguir la procedencia o calidad, más allá de
diferencias muy básicas. Una marca de territorio ofrecería a consumidores la
garantía de la procedencia y para los productores, un valor agregado.
Además del aguacate, hay otros productos que podrían generar valor
agregado aprovechando el origen y creando otros eslabones antes de salir del
territorio; por ejemplo, el tomillo.