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Las cadenas de valor ¿oportunidades para los más pobres?
Revista Estudios Sociales n.
o
82, ISSN 1409-4819, pp. 27-77
inversión fuerte, que productores pequeños como los del territorio estudiado
no están en condiciones de asumir; entre otras razones, por las limitaciones
para tener acceso a los sistemas financieros disponibles.
El financiamiento de los cultivos es por la vía personal, ya sea con ahorros
propios o de la familia –préstamo o ahorro–. Solamente uno de cada diez
productores dijo acudir a financiamiento bancario.
Esta actividad se aprende principalmente en el hogar (67 %). Otros
aprendieron en procesos de capacitación informal o formal, incluso
en la universidad; y algunos, en trabajos anteriores o por su cuenta. Sin
embargo, menos de la mitad han recibido capacitación; la cual proviene
principalmente del MAGA y también de Universidad Rafael Landívar,
Intecap y empresas proveedoras.
Los productores mencionaron necesidades de capacitación en diversos
temas; entre ellos: el propio cultivo de tomate, cultivo de otros productos,
uso adecuado de fertilizantes, herbicidas y fungicidas, control de plagas, uso
de casa-malla y ventas.
En cuanto a las limitaciones que enfrentan los productores, resaltan dos:
el mercado (precios) y financiamiento. La mayor limitante para adquirir los
insumos es el incremento constante de los precios.
Otra limitación, no visible para los productores, es la carencia de
mecanismos asociativos que les permita actuar incluso políticamente
para mejorar el entorno institucional. Solo en el plano económico esta
situación es limitante, puesto que permitiría asocios para adquirir insumos
a menor precio, gestionar asistencia técnica, tener acceso a créditos etc.
Sin embargo, a juicio de personas entrevistadas en el territorio, el fracaso
de experiencias anteriores ha desanimado a los productores en esta
posibilidad de trabajar como red o como socios. Actualmente no existe
alguna asociación que integre agricultores que producen tomate. Solo dos
personas indicaron que hay asociación de productores, pero no hicieron
referencia a participar en ella.
La amenaza más grande durante el proceso de cultivo es la presencia de
plagas o enfermedades –que mencionan más de la mitad de productores–, así
como la incertidumbre en los precios, es decir, limitaciones en el mercado.
Con menor frecuencia se mencionó tener problemas con el clima, un factor
muy importante en el cultivo del tomate.
La mayoría de productores consideró posible aumentar la producción de
tomate, lo cual dependería de varios factores, principalmente: el mejoramiento