Instituto de Investigación y Proyección sobre Dinámicas Globales y Territoriales
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territoriales y socioeconómicas de los pueblos mayas. Su
análisis ayuda a comprender cómo se entendía la organización
social, la territorialidad y la pertenencia a una identidad
étnico-familiar-religiosa particular. Muchas comunidades
cercanas a la vertiente de la bocacosta pacífica poseían ejidos
y terrenos comunales, así como cultivos estacionales en las
tierras bajas, como el caso de San Pedro Sacatepéquez y
Ostuncalco (mam), Zunil y Santa Catarina Ixtahuacán (k’iche’),
o Santiago Atitlán (tz’utujil). En algunos casos, con el pasar
de los siglos, las estancias se convirtieron en poblaciones
lo suficientemente grandes como para convertirse en
municipios, como el caso de Nahualá (k’iche’, segregado
de Santa Catarina Ixtahuacán), o Zunilito y Santo Tomás
la Unión (k’iche’, segregados de Zunil), lo que confirma
la permanencia en el tiempo de las lógicas heterárquicas,
particularmente en territorios importantes alejados de sus
cabeceras, pero con mucho poder y autonomía. En otros
casos fueron segregados a la fuerza, como los antiguos ejidos
de San Martín Sacatepéquez (mam) en las tierras bajas, que
pasaron a convertirse en los municipios de la Costa Cuca,
creados para servir específicamente al cultivo del café.
Otro caso similar es la creación de varios municipios en
la bocacosta de San Marcos, con los mismos fines, donde
anteriormente eran «estancias».
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Algunos municipios, como
los mencionados Ixtahuacán y Zunil, conservan hasta la
actualidad sus diferentes pisos ecológicos, que van desde los
3000 metros hasta los 500 sobre el nivel del mar.
Stefania Gallini, en su estudio sobre el uso histórico
de diferentes pisos ecológicos por parte de los mam de
San Martín Sacatepéquez, denomina a esta dinámica
como «complementariedad vertical» de ecosistemas.
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56 González-Izás, Modernización capitalista, 273-274.
57 Stefania Gallini, Una historia ambiental del café en Guatemala: la Costa
Cuta entre 1830 y 1902 (Guatemala: Asociación para el Avance de las
Ciencias Sociales en Guatemala, 2009), 31-32.