Instituto de Investigación y Proyección sobre Dinámicas Globales y Territoriales
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relaciones que establecen, sobre todo desde su experiencia y cotidianidad, transforman dichas relaciones
que les subyugan en espacios y tiempos concretos, y que pueden ser trascendidos.
Estos sujetos pueden o no influir en la esfera pública porque la adversan o buscan caminos alternos,
todo con la finalidad de transformar y buscar un nuevo proceso civilizatorio, una nueva racionalidad
de la vida. Desde aquí la importancia de ahondar en la subjetividad de los sujetos que subyace en sus
reflexiones, sus deseos, motivaciones y discursos se dilucida y se va constituyendo en sus prácticas.
Y desde esta subjetividad que va también trastocándose y a su vez trastocan la constitución de sus
identidades individuales y colectivas, ambas se construyen y van constituyendo al sujeto, en esa relación
intrínseca de subjetividad, identidades (territorializadas y transnacionalizadas) y transformación social.
Este proceso es lo que finalmente este trabajo empírico y de reflexión teórica quiere aportar, cómo es
que este proceso se está realizando desde la población migrante y sus familiares en Huehuetenango.
En el caso de los migrantes indocumentados es evidente que desde la transgresión de la “legalidad y
los muros nacionales fronterizos”, allí se enfrentan ya a subvertir el orden establecido, que les niega
condiciones de vida digna y que por lo tanto se aventuran contra todo riesgo a construir otras formas de
posibilidad para la realización de su vida y la de sus familias. Desde allí empiezan a generar la posibilidad
de transformar su realidad, modificando sus relaciones sociales o de experiencia, como la llama Ricardo
Falla: «Experiencias migratorias que se realizan en diversos ciclos, de ida y retorno.»
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El cambio del
rol de las mujeres en los hogares y la juventud en sus comunidades de origen y destino, así como las
dinámicas de poder local que se modifican. Tampoco es que estos cambios los estén generando en su
relación con el “poder público” sino más bien, están siendo afectados por el abandono de ese poder y
por la exclusión del sistema socioeconómico, cuando se van y cuando vuelven. Son invisibilizados sus
aportes a la economía y el equilibrio en la demografía norte-sur, como el hecho de que este sistema
agudiza sus condiciones de vida en el país de origen y les explota en el país de destino, pero con la
reflexión que a pesar de ello no se quedan con esto sino que producen posibilidades de actuación en sus
propios contextos.
La realidad migratoria invita a preguntar a las personas migrantes y a sus familiares por la historia que
portan, por el nuevo imaginario que construyen, por los nuevos aprendizajes que realizan: ¿Dónde
están —como los llama Zibechi— estos “actores y sujetos en movimiento”?
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¿Qué tipo de cambios
y posibilidades/potenciación para la transformación están y pueden provocar?, como lo argumenta
Zemelman.
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68 Ricardo Falla,
El sueño del Norte en Yalambojoch, facetas de la migración retornada (Guatemala: Avancso, 2012), 1-148.
69 Zibechi,
Autonomías, 1-341.
70 Zemelman,
Voluntad de Conocer.