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Instituto de Investigación y Proyección sobre Dinámicas Globales y Territoriales (IDGT)

Su hija actualmente vive en Atlanta, en la mañana va a la escuela y por la tarde trabaja part 
time en una tienda de un inmigrante de la India, está cursando el décimo grado y le faltan 
dos años para graduarse de high school. Ella se presenta a sus citas en la corte y busca 
quedarse en los EE. UU. Efraín vive actualmente en su aldea de origen en el municipio 
de Zacualpa, reside con su esposa y su hijo menor en una vivienda que logró construir 
luego de su primera estancia en los EE. UU. Se comunican todos los días vía telefónica 
con la hija que se quedó en Atlanta y esperan que ella pueda luchar y salir adelante en 
ese país.

Efraín es consiente que la realidad en Guatemala es difícil y esto es lo que motiva a los 
guatemaltecos a probar suerte en Estados Unidos:

Cuando yo estuve allá pensé muchas cosas, a veces yo decía porque muchos inmigrantes vienen 
deportados, algunos logran su deuda, hay algunos que no logran. Se me venía a la mente ¿Por qué 
el gobierno no le busca un trabajo más o menos a la gente? Más o menos como aquí en Quiché 
que busquen una compañía, para toda la gente deportada que trabaje. Porque la verdad es que 
uno no va a Estados Unidos porque quiere ser rico sino porque quiere sacar a la familia adelante, 
pero a veces no hay oportunidad. Hay mucha gente, no solo yo que sufro de eso. Pero qué se 
hace, si uno no prueba no logra nada. Solo Dios sabe qué hace con uno.

La verdad que a veces yo digo ¿Por qué en este país no se va adelante?, porque este país tiene 
dinero, Guatemala tiene dinero; pero lastimosamente los que trabajan de gobierno, los que 
manejan el dinero no sé cómo hacen con el dinero. Por eso a veces yo digo, Estados Unidos 
tiene ley, tienen trabajo porque la ley es ley. Si te caíste en algo tenés que pagar una multa, aquí 
en Guatemala no (…) Por eso Guatemala nunca se va para arriba, por eso mucha gente migra, 
mucha gente se va, porque aquí no hay oportunidades de trabajo, no hay trabajo. Por ejemplo, 
ganas 40 quetzales al día y las cosas están subiendo, las cosas no están bajando (…) Uno piensa 
dónde voy a estar, por eso la gente decide, voy a decidir prestar un dinero así logro hacer una mi 
casa, hacer algo, esos son los sueños que hace que uno se va, porque allí se gana, si uno también 
mira el trabajo o también ahorra el dinero. Pero si uno va solo a gastar el dinero no hacés nada.

Efraín comenta que desde la primera vez que migró a los EE. UU. la realidad en el 
municipio de Zacualpa y en el departamento de Quiché no ha cambiado y por eso las 
personas siguen migrando. Lo que ha cambiado es que cada vez van más menores de 
edad con o sin sus familiares: «Ahora están migrando más, están migrando más con 
familia, pero sí están yendo la gente a Estados Unidos, están migrando». Efraín también 
tiene un reclamo hacia los abogados que presentan sus servicios en los EE. UU.: