95

«Otra vez a lo mismo»: Migración de retorno y procesos de reintegración en el altiplano occidental de Guatemala

permiso de trabajo, es el estado no la migración. Si tenés residencia entonces sí tenés derecho 
de manejar (…) Ojalá que gane otro gobierno que le dan licencia a los que tienen permiso de 
trabajo, porque tenés un permiso de trabajo pero no te dan la licencia, es igual que no tenés nada, 
no podes manejar, no podes salir, nada.

Dios sabe cómo hace con la gente, Dios sabe cómo lo ayuda a cada uno. Busca la vida cómo 
puede, si te agarra la policía tenés que pagar una multa de 1,500 a 2,000 dólares por no tener 
licencia. Si tuviste un choque, más multa de choque. Está muy duro, por eso uno mejor prefiere 
caminar en una bicicleta y vámonos, porque así no hay peligro, manejando un carro sí. Allí está 
dura la ley en Georgia, otros estados están un poco calmados. Hay muchos que nos fuimos 
juntos, en otros estados les dan dos años o tres años, pero en Georgia no.

Varias veces fue citado en la corte y buscó apoyo de abogados para lograr quedarse en 
los EE. UU. sin embargo, en febrero de 2016 le indicaron que no tenía posibilidades de 
quedarse. Sobre esta cita Efraín menciona: «Hay migración como que siente la necesidad 
de un inmigrante y hay migración que no le importa los inmigrantes». Finalmente, Efraín 
optó por firmar su salida voluntaria: «Yo dije a la abogada, yo prefiero pagar mi boleto, 
porque ya sentí una vez cuando me agarraron y me encerraron tres semanas en la cárcel 
y me sentí muy triste, ya no quiero eso, prefiero pagarme mi boleto». No obstante, la hija 
de Efraín no quiso retornar a Guatemala «Yo no voy papi, yo quiero estudiar acá». La hija 
optó por quedarse en los EE. UU. y el padre aceptó la decisión:

Ella decidió así (…) sí la dejaron a ella porque es menor todavía, entonces sí siguió estudiando 
allá, quedó con mi cuñada. Está estudiando, pero llega sus 18 años, solo Dios sabe qué le van a 
hacer, llega sus 18 años sacan y la sacan para afuera.

Tras un año y siete meses de estar en los EE. UU., Efraín retornó a Guatemala en 2016. 
Sobre la experiencia de esta segunda vez en el país del norte Efraín cuenta:

Si se van a ir piénsenlo bien porque no es fácil allá, allá no es fácil, te hacen como esclavo. A 
ellos no le importa ponerte abogado, tenés trabajo o no tenés trabajo (…) Trabajas en el campo, 
cuando llueve no hay trabajo y pierdes dos días a la semana. Gracias a Dios siempre lo ayuda a 
uno, trabajé lo que pude trabajar (…) Ahorita estoy aquí, no se puede allá, tengo que vivir aquí no 
hay de otra (…) Prefiero estar en mi país, no como nada, pero tranquilo, nadie me hace esclavo 
(…) así está la ley allá, por eso yo regresé otra vez, no se puede.