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Los caminos de la creación artística, procesos de vida
Llevaron a cabo improvisaciones de contacto, las cuales consisten en una forma de
interacción libre entre los cuerpos, con el fin de tener una exploración de espacios e
interrelaciones durante el proceso creativo.
Existió una constante búsqueda de comunicación entre el grupo de actores más allá de
las palabras, con el objetivo de encontrar una conexión profunda entre ellos y ellas. Hubo
experiencias como la de un actor caminando con la vista fija hacia un punto y otro que le
seguía, adivinando cuál era su dirección. Esto pretendía trabajar la claridad de la mirada
para quien marcaba el destino y la «escucha» de quien le seguía, una escucha al cuerpo del
otro. Patricia Orantes, directora del colectivo, explicó que todas estas prácticas pretenden
comunicarse más allá de lo evidente, descubrir al otro sin hablar.
Otro ejercicio fue interpretar los parlamentos sin hablar, solo gestualmente, bajo la
perspectiva de un juego, donde era necesario ver en qué momento había que ceder ante
el otro personaje, tanto corporalmente, en cuanto a peso y movimiento, como a nivel
del conflicto teatral. Esto permitió encontrar pausadamente algunos gestos que fueron
usados en escena.
Patricia Orantes insistió durante todo el proceso creativo en la praxis del juego, en evitar
la solemnidad y estar siempre en atención a los otros. Enfatizó siempre en la necesidad
de sentirse entre los actores y en un movimiento cómodo en el espacio tomando en
cuenta la relación con los demás.
Durante el proceso creativo, hubo prácticas muy interesantes, como indagar en qué
lugar del cuerpo de un actor resonaba el otro; esto en relación con el parlamento. Por
ejemplo, en una escena de amor que se da entre un hombre y una mujer que trabajan
en el basurero, este fue un ejercicio importante. Patricia Orantes preguntó al actor «¿en
qué lugares del cuerpo te resuena ella?», en un intento de traducir en el cuerpo esa
emocionalidad entre los dos personajes.
Se llevaron a cabo prácticas de fortalecimiento de la confianza a partir de ejercicios
con las corporeidades. Hubo un ejercicio donde un actor tenía que tumbarse al piso sin
poder hacer movimientos y comunicar a los otros sus intenciones solamente a través de
los ojos. Las y los demás tenían que tratar de entender lo que el otro quería. Se hicieron
muchos diálogos solamente con la mirada. La directora insiste: «¡Lean con los ojos, si