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Instituto de Investigación y Proyección sobre Dinámicas Globales y Territoriales (IDGT)

Por otra parte, hay una atención constante en los detalles de la relación entre los músculos 
y los miembros del propio cuerpo para lograr un movimiento. Por ejemplo, si se desea 
levantar un brazo, cómo está implicado el hombro, el antebrazo, las manos, los dedos. 
Existe un continuo cuestionamiento de cómo cada «micromovimiento» puede ser más 
eficiente para lograr el movimiento más grande. Esto hace que se trabaje de forma muy 
consciente la relación entre intención y movimiento, una relación estrecha con el cuerpo, 
que no se da en otro tipo de interrelaciones y actividades en diferentes colectivos.

En el grupo de teatro, crearon parte de la dramaturgia a partir de ejercicios 
corporales, como vendarse los ojos y concentrarse en el olor del otro, pero en 
personaje. Bajo el cuestionamiento de «¿a qué huele, no el actor, sino el personaje?», 
crearon analogías que permitieron profundizar en los parlamentos. Textos como «él 
huele a tierra mojada, a lluvia» y el contraste a «usted huele al lugar sin ventanas», 
fueron presentados por el personaje de Mariam Arenas para contrastar los espíritus 
en el lugar de los muertos, presentados en la obra 

Hambre y Tierra. Mientras las 

primeras sensaciones se refieren a un campesino que dejó su tierra para buscar mejor 
vida en la ciudad, el otro texto refiere al recuerdo de un lugar de tortura y quien 
la perpetraba. Estos parlamentos se construyeron a partir de intensos ejercicios 
corporales. Estos determinaron un momento muy importante a nivel sensorial y 
a nivel de la dramaturgia. Cuando se cierra un sentido, en este caso el de la vista, 
cambia toda la postura corporal y el movimiento. 

Sabrina Castillo, directora del grupo Momentum, explica que existe otra forma de 
escucha con todo el cuerpo, que no se limita a los oídos: «Es estar atento a la piel, a 
cada milímetro, a qué se siente, el peso. Sentir como el contenido, lo que está adentro 
(los músculos, los órganos) y cómo eso pesa, se estira. Es irse bien hacia adentro, pero 
también hacia afuera. Es como implosionar y explotar».

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Otro aspecto importante observado fue el trabajo de preparar el propio cuerpo para 
tener acciones con los otros cuerpos. Por ejemplo, el grupo de teatro tuvo un proceso 
para aumentar su resistencia física, ya que el requerimiento de los personajes exigía tener 
la suficiente fuerza para cargarse entre sí, tanto los hombres como la única mujer del 
grupo, debían sostener el peso del otro. 

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Ibid.