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Instituto de Investigación y Proyección sobre Dinámicas Globales y Territoriales (IDGT)

su madre «se murió y se sigue muriendo» por esto. Por presión ejercida por ella, decidió 
estudiar Publicidad en la universidad, aunque no era lo que realmente deseaba; pero siguió 
fiel a su pasión que es la escultura, aunque su madre también replicaba que es peligroso por 
los químicos, los olores y porque es un trabajo que no es bien pagado. 

Andrea Ayala y Sofía Barrios, ambas integrantes del grupo de danza contemporánea 
Momentum, también comparten esa huella profunda de la madre en sus vidas. Hubo 
ausencia del padre en ambos casos. Andrea habla con admiración de que su madre 
asumió la responsabilidad de criarla sola y Sofía sostiene que la lucha de su mamá por 
salir adelante es un ejemplo para fundamentar su lucha por desarrollar su pasión, que 
es la danza, en un país como Guatemala, donde la disciplina enfrenta importantes 
dificultades. Considera que la danza contemporánea es de las áreas artísticas más difíciles 
de que el público la aprecie y asista a las funciones. 

Sandra Monterroso, artista visual y facilitadora del taller de investigación en la práctica 
artística y creatividad de ArteCentro, tuvo una impronta muy importante de su abuela 
materna, particularmente en el momento en el que ella muere. Su abuela, de origen q’eqchi’, 
se comunicaba con Sandra en su idioma materno, que no era comprendido por ella. 

La artista siente a partir de ese momento lo que denomina «un primer llamado»:

Hay un primer llamado, digamos así… porque lo que entendí después es que ella me estaba llamando 
hacia sí misma, a sus raíces, a su cultura. Le pregunté a mis tías qué me estaba diciendo y me dijeron 
«es que tiene sed, quiere que le des de tomar agua». Entonces yo le daba de beber y todo. Empecé a 
soñar con ella. Soñaba que me hablaba en q’eqchi’ y que yo también hablaba. Entonces me despertaba 
y pensaba. El mensaje es que yo me tengo que acercar más a la cultura. Y fue así que empecé a 
acercarme más, a investigar sobre mi familia, la cultura maya, la arqueología y la antropología. También 
a acercarme más a mi mamá. A reconocer a mi familia materna, a ir a las Verapaces.

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Para Sandra este momento con su abuela marcó rupturas y reconstrucciones en su 
identidad, un cuestionamiento profundo sobre sí misma y también se abrió la visión 
hacia rechazar las diversas formas de racismo, explícitas o sutiles que se dan en la práctica 
cotidiana. El proceso de profundizar en sus raíces q’eqchi’ fue largo. Su abuela muere en 
1998, y de esta búsqueda nacen obras artísticas hasta 2004. 

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  Entrevista realizada el 28 de abril de 2017.