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Instituto de Investigación y Proyección sobre Dinámicas Globales y Territoriales (IDGT)
proceso creativo, se refugian en un mundo inmaterial e íntimo, donde siempre están en
búsqueda del porqué de los hechos. De esta forma escapan de la crueldad, e incluso,
pueden experimentar belleza en situaciones extremas. Para la noción de resiliencia, un
problema no tiene una causa única, sino que trata de comprender las formas en que un
golpe puede ser asimilado, provocar efectos variables y posibles rebotes.
«Es mejor decir que la resiliencia es un proceso diacrónico y sincrónico; las fuerzas biológicas
de desarrollo se articulan con el contexto social para crear una representación de sí que
permite la historización del sujeto. Se puede decir más simplemente, que la resiliencia es un
tejido que anuda la lana del incremento del desarrollo con una lana afectiva y social. Por eso es
mejor describir un itinerario de personalidad resiliente, y tratar de comprender cómo se cuela
a través de los golpes del destino, para sin embargo tejerse a sí misma con apoyos sólidos».
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Según el autor, cuando un contexto social está demasiado estructurado u organizado, da
seguridad, pero mata la creatividad porque se debe responder a estrictas normas, lo cual
simplemente forma para reproducir aquello normado por el contexto. En este sentido,
se «vuelve a una situación de creador y pasa a formar parte de la banda de innovadores,
científicos o artistas, que son necesariamente marginales, ya que introducen en la cultura
alguna cosa que no estaba antes de ellos».
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Hay posibilidades de creatividad si se da lugar a la palabra, lugares o espacios de
expresión. De lo contrario hay tendencia a la delincuencia, dado que la energía no
encuentra cómo ser canalizada.
Cuando la tragedia es vivida intensamente, esto empuja a la creatividad. Esto no quiere
decir que el dolor es una condición
sine qua non para ser creativo. Sin embargo, una forma
de sobrevivir es entrar en el ámbito de la representación. La reconstrucción de un objeto
o de una persona perdida aminora la sensación de separación. La creación imaginaria es
una forma de consuelo, así como los textos o las escenas teatrales. La capacidad de soñar
es un elemento esencial en los procesos recipientes. La poesía, por ejemplo, se genera a
partir de lo simbólico, la imagen y el relato. Es así que ante la dificultad, se convierte en
un arma para sobrevivir.
25
Cyrulnik,
La maravilla del dolor, 40.
26
Ibid., 60.