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Políticas migratorias estadounidenses y resistencias de los centroamericanos indocumentados en la era de Trump

Las luchas de los DACAmentados, cuyo origen, facetas y aliados son expuestos en la 
tercera sección, fueron incluidas en este texto para mostrar el juego de tensiones entre las 
políticas y las resistencias de un segmento de los indocumentados. Los DACAmentados 
son un híbrido entre políticas y luchas de ese gran no-movimiento (un grupo atomizado 
cuyas decisiones individuales confluyen en acciones tan contundentes como las que podría 
concertar un movimiento) de los indocumentados. Por esa fuerza y por las simpatías que 
suscitan entre analistas, políticos, periodistas y otros constructores de opinión pública, 
Trump no los puede suprimir de un plumazo. De ahí las propuestas legislativas de 
solución que son alternativas a su deportación. La creación de los DACAmentados podría 
convertirse en un modelo de cómo se puede construir una categoría sociodemográfica 
con fuerza políticas y mediática, que expanda la posibilidad de legalización de otros 
segmentos de los indocumentados.

La categoría de la teatralidad de la política como medio de penetrar en el alcance y el 
sentido de sus políticas migratorias me permite ahora hacer una distinción inicial entre 
eficacia instrumental y eficacia escénica. Hay cambios en las políticas migratorias que 
pueden ser detectados a corto plazo: rudeza de los operativos anti-inmigrantes (redadas, 
control fronterizo), cancelación de apoyo financiero a ciudades santuario, suspensión 
del TPS, endurecimiento de la penalización por ingreso irregular, reforma de la ley que 
ampara a niños no acompañados, restablecer el programa de comunidades seguras, etc. 
Otros elementos solo pueden monitorearse en el mediano plazo: cifras de admitidos 
a refugio y asilo; agentes de la Border Patrol y otras instancias que aplican las políticas 
migratorias, el número de detenidos y deportados; los kilómetros añadidos al muro 
fronterizo; los presupuestos para programas anti-inmigrantes y concesiones de visas, 
residencias y ciudadanía.

Los primeros se refieren más al teatro del poder, que importa mucho porque sus 
efectos mediáticos son sustanciales y su efecto dominó puede ser mucho mayor que 
el de las deportaciones multitudinarias, con la cobertura mediática adecuada: detener 
a una indocumentada en una cama de hospital y aplicarle una deportación expedita, 
infunde más pánico que miles de deportaciones rutinarias y silenciosas. Los segundos 
se refieren al efecto objetivo y mensurable, que es el principal indicador de la eficacia 
de las políticas. Por tanto, aquí se complementan –no se oponen– eficacia escénica y 
eficacia instrumental. Es importante recordar que las políticas buscan tener un efecto 
disuasivo: transmitir un mensaje que inhiba nuevas migraciones. Por tanto, la eficacia 
escénica podría rendir mayores resultados a corto plazo.