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4.4
Articulación de Científicos
Este es sin duda el campo más complejo. No se trata sólo de las dificultades de articular
diferentes lecturas temáticas de la realidad, sino lograr esa articulación superando las
tendencias a la endogamia que las relaciones interpersonales han desarrollado. Cuando
formulamos esta instancia teníamos la esperanza que la misma pudiera aportar datos acerca
de los problemas que la investigación interdisciplinaria encuentra en los equipos de trabajo,
para que en base a la prédica ambientalista de solidaridad y mejoramiento de la calidad de
vida, puedan superarse en función de nuestros altruistas objetivos. Pero entonces aún lo
ambiental luchaba por salir de la clandestinidad a lo que la había arrojado la enfurecida
reacción de las disciplinas. Lo ambiental constituía para su lectura un conocimiento que no
encontraba su nicho y que osadamente decía que era el de todos y no contento con esta
definición mencionaba la posibilidad de reformular el nicho de cada uno y, para llegar al final
de la tragedia, manifestaba la intención de unir los nichos con contaminaciones seguramente
aberrantes e incoherentes. Decenas de años del establecimiento de alambradas
disciplinarias que conservaban la paz universitaria era amenazada por la irrupción de un
dilatante conocimiento. En el pasado, esta paz sólo fue interrumpida por la necesidad de
explicación de algunos fenómenos nuevos, pero en poco tiempo fue absorbida por el
establecimiento de ramas específicas dentro del gran nicho disciplinario. Pero en este caso
se ambiciona más y las reacciones no tardan en manifestarse. Durante años lo ambiental
quedaba recluido a cursos esporádicos de diferentes ámbitos del saber. Pero en la
actualidad, los cambios en tal sentido son sustanciales. Todos los proyectos deben ser
evaluados ambientalmente de alguna forma. Lo ambiental ya constituye un objeto de
valorización, y la apropiación privada de los conocimientos atenta contra el desarrollo de los
equipos interdisciplinarios. Los equipos contratados por consultorías van reemplazando en
importancia a los equipos nacionales y provinciales. Sin embargo, las interrelaciones
sociedad-naturaleza se han vuelto más evidentes. En parte, por el aumento de la conciencia
ambiental por parte dela población. En parte, por agravamiento de los problemas
ambientales y por la agudización de los problemas sociales y globales. Una profundización de
estas contradicciones puede arrojar un análisis de gran valor para discutir francamente las
bases que nos permitan avanzar en la formación de equipos interdisciplinarios.
5 NUEVOS PROBLEMAS INTERDISCIPLINARIOS AMBIENTALES
En los planteamientos elaborados en la década pasada insistíamos que la enseñanza de lo
ambiental debía necesariamente radicar en el nivel de postgrado. Todas las ciencias debían
concurrir a su articulación para dar cuenta de los fenómenos complejos. Las llamadas
“Ciencias Ambientales” había quedado en gran deuda, y por lo tanto en descrédito al no
suministrarnos una lista de las Ciencias No Ambientales con respecto a las cuales se
diferenciaban. La aparición de algunos grados ambientales como la Licenciatura de
Administración Ambiental en la Universidad Nacional de Pereira con la cual contribuimos, no
significó una contravención a nuestra convicción porque se trataba en gran parte de una
reelaboración ambiental de la administración. Sin embargo, se están desarrollando en
muchos países de América Latina grados sobre Medio Ambiente. Licenciatura en Gestión
Ambiental, en Información Ambiental, constituyen algunos de los casos. Muchos más
frecuentes son las “técnicaturas en medio ambiente” con la particularidad que luego de tres