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el cielo. Kukulkán ascendiendo hacia la Estrella de la Mañana: he 
ahí el sujeto utópico de Asturias, solo resuelto y alcanzado en la 
literatura, y planteado como objeto de deseo social, político e 
ideológico para quienes, después de haberlo alcanzado, quieran 
optar por el azul del cielo como su casa.

El carácter democrático del sujeto popular interétnico 
asturiano

Slavoj Žižek nos recuerda que la respuesta lacaniana a la pregunta 
¿quién es el sujeto de la democracia?, es inequívoca: 

El sujeto de la democracia no es una persona humana, es decir, 
‘el hombre’ en toda la riqueza de sus necesidades, intereses y 
creencias. El sujeto de la democracia, como el del psicoanálisis, no 
es otro que el sujeto cartesiano en toda su abstracción, o sea, esa 
puntualidad vacía a la que llegamos después de sustraer todos 
sus contenidos particulares.

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Ya que el sujeto democrático es tal solo si se lo plantea 
independientemente de su raza, sexo, preferencia sexual, religión, 
estatus social y económico y credo político (es decir, como un 
fulano de tal), este significante vacío permite, precisamente por 
su vacuidad, ser sujeto de ese otro significante flotante que viene 
dado por la hegemonía (el universo simbólico hegemónico) y que 
le otorga sentido específico al sujeto abstracto en circunstancias 
históricas determinadas (Laclau)

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En otras palabras, la hegemonía –que es una circunstancia 
concreta, política– dota de contenidos positivos a la abstracción 
que los ha sustraído a fin de armar un sujeto capaz de 

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 Para una exposición exhaustiva del esoterismo ecuménico que llega a Occidente en 

el entresiglo, ver P.D.Ouspensky. In Search of the Miraculous. New York-London: Harcourt 
Brace, 1977.

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 Slavoj Žižek. Looking Awry: An Introduction to Jacques Lacan Through Popular Culture. 

Cambridge, Mass-London: October Books, 1992: 163, traducción mía.