66
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales
1. Situación de Corea del Norte
Para analizar la política exterior de Corea del Norte,
es importante conocer la situación económica actual del
país, las relaciones comerciales que el régimen de Kim
Jong-un tiene con otros países, y entender las fortalezas
y debilidades estructurales de la balanza de pagos, esto
permite establecer qué opciones tiene el país en materia
de alianzas y la viabilidad para el desarrollo de nuevos
proyectos económicos (incluyendo el sector militar).
Hong y Cho (2017) consideran que el régimen de Kim
aún con el riesgo de colapso demuestra que las sanciones
no han sido efectivas. A pesar de la aprobación de la
Resolución 2270 del Consejo de Seguridad de las Naciones
Unidas, Corea del Norte no ha mostrado ningún signo de
cumplimiento. Por el contrario, su comportamiento se ha
vuelto más desafiante, con pruebas de misiles adicionales.
Corea del Norte sigue siendo una sociedad cerrada y de
acuerdo a estos autores, el país está ya muy acostumbrado
a las sanciones económicas del exterior.
Esta capacidad o resistencia a las sanciones comerciales
se debe sobre todo a dos factores. El primero es que China,
siendo el mayor socio comercial de Corea del Norte, no ha
endurecido el trato comercial hacia Pyongyang, a pesar de
las resoluciones de la Asamblea General de las Naciones
Unidas, al contrario, recientemente se anunció que Corea
del Norte y China anunciaron planes para construir dos
nuevas Zonas Económicas (SEZ), en dos islas de Corea
del Norte: Hwanggumpyong y Wihwa, situadas en el río
Yalu entre Dandong y Sinuiju. Estos nuevos proyectos de
desarrollo urbano; el puente y las dos ZEE, conforman el
plan para construir en Dandong un centro económico de
relevancia en Asia Oriental (Kim, 2017).
Existen evidencias también de que aún con la última
ronda de sanciones a Corea del Norte, por parte del
Consejo de Seguridad de la ONU en marzo de 2016 y de las
sanciones de los Estados Unidos en junio de 2016, el tráfico
marítimo de buques con mercancía y personal de China
continuó sin restricciones evidentes a lo largo de 2016.