142
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales
la retórica ideologizada y la torpeza en materia económica
caracteriza a un régimen venezolano frente al cual tampoco
la oposición se plantea como alternativa real de poder, con
el resultado que los ciudadanos han terminado por «votar
con los pies» y abandonar masivamente el país.
En Brasil la derecha logró derrocar «legalmente» al PT
de Lula durante el segundo mandato de Dilma Rouseff y la
falta de un respaldo popular efectivo para la defenestrada
presidenta parece tener como causa el desencanto de
las grandes mayorías por la forma como la izquierda se
acomodó y negoció con un capitalismo que colocó a Lula
en la cárcel para evitar que participe en las elecciones
de 2018. La democracia no profundizó, ni la satisfacción
de los derechos económicos y sociales, aunque debe
reconocerse que las transferencias condicionadas de los
programas sociales funcionaron relativamente bien, pues
un considerable número de brasileños salió de la pobreza y
continua siendo la base popular de apoyo del PT.
Bolivia y Ecuador parecen tener gobiernos progresistas
debidamente consolidados – y en ese sentido vale la pena
leer el texto en el cual Boaventura de Sousa Santos hace
un análisis muy se ve completo acerca de la refundación del
Estado en ambos países (Sousa, Santos, 2010). También
con buenos ojos los avances sociales y la profundización de
la democracia en Uruguay, que José Mujica ha sido uno de
los presidentes más ilustres de la historia latinoamericana
de los últimos tiempos: carismático, modesto y practicante
de una austeridad ejemplar, lúcido en sus juicios y discursos,
demócrata verdadero no retórico.
Por el contrario, el régimen sandinista de Nicaragua
parece haber olvidado del todo los viejos ideales
revolucionarios de la década de los setenta. Se acomodó
a la corrupción y el neo autoritarismo de Daniel Ortega
–al mejor estilo de su predecesor de antes de 1979– en
detrimento de la democracia. La represión contra las
protestas populares en 2018 han causado el suficiente
número de muertes como para que se haya requerido a
la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)
de la OEA para que realice investigaciones por violaciones