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Facultad de Ciencias Políticas y Sociales

Este panorama de aumento sostenido de la cooperación 

regional variará en los próximos años, dado el debilitamiento 

de los fondos de cooperación internacional en general y 

de América Latina en particular. En el primer borrador de 

presupuesto de la administración Trump, se propone una 

reducción del 35 % en todos los programas, algunos de 

ellos vinculados con la seguridad podrían ser financiados 

por el Departamento de Defensa (Isacson, 2017), aunque 

este también sufriría una rebajada 10 %, pues pasaría 

de un billón de dólares a 0.9 billones (U.S. Department 

of Defense, 2017). Mick Mulvaney, director de la Oficina 

del Presupuesto de Trump, al presentar el borrador de 

presupuesto para 2018, señaló: «El presidente dijo que se 

iba a gastar menos dinero en la gente de fuera y más en la de 

casa», y luego concluyó que «[e]s un presupuesto de poder 

duro, no blando, y es algo intencionado. Este el mensaje 

que queremos enviar a nuestros aliados y adversarios. Este 

es un Gobierno fuerte y poderoso» (Mars, 2017).

El gráfico 4 presenta la evolución de la cooperación 

que se gestiona mediante el Departamento de Estado 

y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo 

Internacional (Usaid, por sus siglas en inglés), aunque 

no constituye un panorama completo de la cooperación 

estadounidense (pues esta también se suministra por otras 

agencias del gobierno). Según este recuento, el presupuesto 

programado para 2018 tuvo un recorte sistemático en 

comparación con los tres años anteriores, donde los países 

más perjudicados son aquellos más favorecidos por la 

Alianza para la Prosperidad: Guatemala, El Salvador y 

Honduras. Costa Rica tuvo una reducción menos sensible y 

Nicaragua quedó sin ninguna asistencia.