FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y EMPRESARIALES
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El principio básico de la economía experimental es
la teoría del valor inducido (Smith, 1976 y 1982),
referida a que el uso de un medio de recompensa
apropiado permite promover un comportamiento
determinado en los agentes, de manera que
sus intereses particulares no interfieran con el
propósito del experimento. Estos incentivos reales,
en dinero efectivo, se entregan a los sujetos que
con sus acciones hayan generado las mayores
ganancias en el juego.
Smith (2002) identifica tres ingredientes básicos
en todo experimento económico, siendo estos el
entorno, las instituciones y el comportamiento.
El entorno especifica los recursos iniciales, las
preferencias, los costos que pueden motivar el
intercambio entre los agentes en el experimento;
las instituciones definen la manera en la que los
sujetos pueden interactuar, el método por el que
se intercambia la información y las normas bajo las
que estos mensajes tienen capacidad vinculante,
todo ello definido por las instrucciones que reciben
los sujetos y que describen los procedimientos que
rigen en el experimento; el ultimo componente es
el comportamiento de los agentes que participan
en ellos, que siempre debe ser interpretable como
reacción al entorno y a las instituciones.
3. Historia de la economía
experimental
El campo de la economía experimental ha sido
explorado desde las primeras décadas del siglo XX,
se considera que los primeros pasos fueron dados por
Thurstone (1931) al analizar experimentalmente el
problema para determinar las curvas de indiferencia
individuales haciendo elegir a sus sujetos entre
cestas de bienes hipotéticas de manera sistemática.
Pero dos acontecimientos en los años 40 fueron
probablemente los que dieron el punto de partida
de la experimentación en economía. El primero,
la publicación de la teoría de juegos, la obra de
von Neumann y Morgenstern (Teoría de juegos y
comportamiento económico) en 1944.
Esta obra dio origen a una comunidad de “jugadores”,
que comenzaron a realizar experimentos para
poner a prueba hipótesis de trabajo y dar cuerpo
a intuiciones teóricas. Una vez echada a rodar
esta práctica, surgieron casi simultáneamente
seminarios y proyectos de investigación en distintas
universidades norteamericanas.
El segundo acontecimiento, se da con la
realización de los primeros experimentos de
mercado propiamente dichos en la Universidad de
Harvard por Edward H. Chamberlain, aunque sus
consecuencias tuvieran un efecto retardado.
En 1952 tuvo lugar la primera conferencia académica
sobre El diseño de experimentos en procesos de
decisión, financiada por la Fundación Ford y la
Universidad de Michigan, que se celebró en Santa
Monica. Por primera vez se presentan resultados
experimentales sobre juegos de negociación
extraídos de entornos económicos donde los pagos
de los sujetos eran determinados directamente por
sus acciones y las acciones de los demás (Cuadernos
de Economía. Vol. 27, 007-036, 2004)
La comunidad de experimentadores ascendió,
tanto en volumen de publicaciones, como en
investigadores a lo largo de los años 60, mientras
algunos de sus miembros abandonaban la disciplina,
caso de Maurice Allais, o dejaban temporalmente
la experimentación, caso de Vernon Smith, futuro
premio nobel. En los años 70 se produce un
reflorecimiento de la disciplina, como consecuencia
sobre todo de la formación del tándem de Tversky
con Daniel Kahneman. La economía experimental
comienza a asentarse institucionalmente, y surgen
las primeras controversias, que a la postre darán
lugar a divisiones disciplinares; (Guala 2005).
Por un lado aparecen los economistas conductuales
frente a los experimentalistas; los primeros pretenden
una revisión de la teoría económica, introduciendo
en la misma supuestos psicológicos más realistas
para reemplazar al imaginario homo economicus;
mientras que para los segundos los experimentos
no son sino una herramienta para la investigación, y
eventualmente la posterior intervención.