Martín Rodríguez Pellecer /

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militares repetían en sus documentos que no podrían 
ganar la guerra aislados de la sociedad y necesitaban 
de la participación de buena parte de la ciudadanía. Y 
los abogados que han juzgado genocidios en el mundo 
repitieron en el juicio que ese delito es imposible sin 
una complicidad de parte de la sociedad. La historia-
dora Marta Casaús lo considera la última escala del 
racismo.

La inversión de capital político de los empresarios 
fue suficiente para que este capítulo del pasado, de 
la alianza militar-empresarial, poco conocido entre la 
ciudadanía, no tenga consecuencias penales ni civiles 
tras el boicot a la sentencia. El Ministerio Público no 
quiso dar declaraciones sobre los temas tratados en 
este reportaje. Quizás algún día sea parte de un libro 
de texto.