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Cuenta Integrada de Recursos Pesqueros y Acuícolas. Bases teóricas, conceptuales y metodológicas
Banco de Guatemala e Instituto de Agricultura, Recursos Naturales y Ambiente de la URL
Recuadro 2
Antecedentes del Sistema de Cuentas Nacionales (SCN)
Los orígenes de la contabilidad macroeconómica pueden rastrearse a partir de los primeros ejercicios desarro-
llados en el siglo XVIII por los fisiócratas, en particular con los trabajos de Quesnay sobre los flujos del ingreso
nacional. A partir de entonces, y luego de varias décadas de avances teóricos y metodológicos, surge el Sistema
de Cuentas Nacionales (SCN) a inicios del siglo XX. La formalización del SCN se remonta al menos a 1928, año
en que la Liga de las Naciones ofreció una conferencia internacional sobre estadísticas económicas, con el fin
de promover la comparabilidad internacional y la adopción de métodos uniformes de presentación. Si bien
el Departamento de Comercio de los Estados Unidos de América empezó a reportar estadísticas sobre la pro-
ducción nacional desde 1934, fue la Segunda Guerra Mundial la que supuso la importancia de contar con un
sistema de contabilidad para responder a la necesidad de estimar los niveles de producción militar y los efectos
sectoriales de movilizar recursos para la guerra.
La experiencia acumulada posterior a la posguerra permitió la publicación del primer informe sobre el Ingreso
Nacional en 1947, el cual fue preparado por el Subcomité de Estadísticas del Ingreso Nacional del Comité de
Expertos Estadísticos de la Liga de las Naciones, el cual fue trabajado a partir de un memorándum elaborado
por Richard Stone (Premio Nobel de Economía de 1984). Tras un proceso permanente de revisión y validación,
se publicaron tres manuales del Sistema de Cuentas Nacionales (SCN) en 1953, 1968 y 1993 (SCN53, SCN68,
SCN93).
El Manual del Sistema de Cuentas Nacionales de 1993 (SCN93) se elaboró con el respaldo de la Comisión de
Estadística de las Naciones Unidas (CENU) y contó con la participación de la Organización de Naciones Uni-
das (ONU), el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM), la Oficina de Estadística de la
Comunidad Europea (EUROSTAT) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
El propósito de dicho manual fue definir las bases teóricas, conceptuales y metodológicas para la contabilidad
macroeconómica. Desde su publicación no ha sido modificado en su estructura central, y sólo ha estado sujeto
a revisiones periódicas que se publican a través de memoranda específica suministrada por la CENU.
Fuente: Elaboración propia, con base en ONU et al., 1993.
El marco contable
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del SCN93 es flexible, dado
que reconoce la necesidad de la creación de
“cuentas satélite”
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para presentar conceptos adi-
cionales o diferentes a los de su marco central,
que amplían la capacidad analítica del sistema,
sin sobrecargarlo o desorganizarlo. Esto se debe
6 Un marco contable consta de un conjunto coherente, sis-
temático e integrado de cuentas macroeconómicas, ba-
lances y cuadros basados en un conjunto de conceptos,
definiciones, clasificaciones y reglas contables aceptados
internacionalmente.
7 Según Ortúzar (2001), las cuentas o sistemas satélite “subra-
yan la necesidad de ampliar la capacidad analítica de la con-
tabilidad nacional a determinadas áreas de interés social” y
permiten: i) proporcionar información adicional sobre deter-
minados aspectos, ii) utilizar conceptos complementarios y/o
alternativos (incluida la utilización de clasificaciones) cuando
se necesitan introducir dimensiones adicionales en el marco
conceptual de las cuentas nacionales, iii) ampliar la cober-
tura de los costos y beneficios de las actividades humanas,
iv) ampliar el análisis de los datos mediante indicadores y
agregados pertinentes, v) vincular las fuentes y el análisis de
datos físicos con el sistema contable monetario.
a que, en ciertos tipos de análisis, el objetivo bá-
sico no es utilizar conceptos económicos alter-
nativos, sino simplemente centrar la atención
en determinado campo o aspecto de la vida eco-
nómica y social en el contexto del SCN.
Por razones operativas, las cuentas satélite se
clasifican comúnmente en dos categorías. Por
un lado, las cuentas satélite internas reorga-
nizan las transacciones existentes en el SCN
para resaltar aquellas que sean pertinentes
para cierto sector; y por el otro, las cuentas
satélite externas extienden el alcance del sis-
tema, incluyendo inventarios, flujos y transac-
ciones que no son contabilizados en el SCN.
La cuenta satélite ambiental, también deno-
minada Sistema de Contabilidad Ambiental