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Revista Eutopía, año 1, núm. 2, julio-diciembre 2016, pp. 51-109, ISSN 2518-8674 

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Se hace una fuerte crítica a las políticas de reparto agrario, a los 
subsidios de los insumos para la producción, al control de precios, 
a la búsqueda de la autosuficiencia alimentaria y a una política 
macroeconómica con sesgo antiexportador (control de precios, 
impuestos a la exportación y sobrevaluación de la moneda).

3. La experiencia del Fondo de Tierras: ¿símbolo de fracaso 

de la política sectorial?

En esta sección se examinan los programas de compraventa de tierras y de 
subsidio parcial de arrendamiento de tierras ejecutados por el Fondo de 
Tierras, una institución surgida en el marco de la política agraria y sectorial 
analizada. 

En la Ciudad de México, el 6 de mayo de 1996, representantes del Gobierno 
de la República, la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca y las 
Naciones Unidas firmaron el Acuerdo sobre Aspectos Socioeconómicos 
y Situación Agraria (Asesa). Este acuerdo incluyó el compromiso de crear 
una entidad con la potestad de concentrar el financiamiento público para 
la adquisición de tierras y con el mandato de contribuir a transparentar 
el mercado de tierras. El acuerdo también identificó diez posibles fuentes 
para conformar el fondo, destacando las siguientes: i) baldíos y tierras 
nacionales; ii) tierras ociosas que se expropien según el artículo 40 de la 
Constitución Política de la República; iii) tierras que se adquieran con 
recursos provenientes de la venta de excesos de tierras que pudieran resultar 
en las propiedades privadas al comparar la medida real con la superficie 
registrada en el Registro de la Propiedad. 

Ninguna de estas orientaciones establecidas en el acuerdo fue implementada. 
El Fondo de Tierras ha operado a partir de las tierras compradas con los 
recursos públicos asignados por el MAGA y su capacidad de respuesta ha 
sido notablemente limitada con respecto a la demanda efectiva del acceso a 
la tierra. Esta situación se agudizó en 2008, al cumplirse el período de diez 
años que obligaba al Estado a asignar recursos financieros a esta entidad

41

Así, a partir de ese año, al no contar con las transferencias del Estado, el 
programa de reparto de tierras por la vía del mercado redujo sus operaciones.

41 Decreto núm. 24-99. Ley del Fondo de Tierras (Guatemala: Congreso de la República, 1999), 

Capítulo III: Mecanismos de financiamiento de los proyectos, artículo 26.