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Revista Eutopía, año 1, núm. 1, enero-junio 2016, pp. 161-173

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queda encomendada al criterio de los maestros, que enseñarán palabra por 
palabra ó frase por frase, á los que no lo conozcan absolutamente, hasta que se 
hallen en estado de empezar su aprendizaje formal del modo que se ha dicho. A 
los que ya hablan el idioma se les dará una clase de escritura al dictado tres veces 
á la semana, en el primer semestre del segundo curso, y de Composición, también 
tres veces por semana, en el siguiente semestre, para enseñarles a hacer recibos, 
cartas, contratos, y otros documentos de reconocida utilidad.

Tal es el programa general de las asignaturas que, en mi concepto, deben ser 
objeto de estas escuelas, breve en su enseñanza, práctico y provechoso en sus 
resultados. Lo he simplificado cuanto ha sido posible, esforzándome en el de 
Instrucción moral y cívica, para elevar en la raza el carácter, que es el distintivo 
mas noble de la personalidad humana, á fin de que ella contribuya a formar, 
engrandeciéndolo, el carácter nacional, y á que los indios gusten de la vida civil 
al par de los otros habitantes de la República, pues tienen a ello igual derecho.

Es indudable que si estas asignaturas se enseñan y aprenden como es debido, y 
si junto con esta enseñanza el Gobierno decreta la abolición de los mandamientos 
y la completa modificación de la ley de trabajadores, es indudable, repito, que se 
logrará lo que tanto se desea, que la bandera de Guatemala, de Centro-América, 
no cobije bajo sus pliegues protectores sino hombres libres é ilustrados.

El éxito de la enseñanza no sería tan completo si ésta estuviera confiada á 
profesores que no fueran indios, y, como los maestros de esta raza escasean, se 
hace necesaria la creación de Escuelas Normales de ambos sexos para indios 
exclusivamente, donde alumnos y alumnas aprendan lo que deben enseñar mas 
tarde en las escuelas de sus propios pueblos y caseríos. En unas y otras se 
enseñarán las mismas asignaturas, cambiándose en las de niñas la de Agricultura 
por Floricultura y Horticultura y añadiéndose la de Labores de Mano en la forma 
que la maestra juzgue mas adecuada.

Estas Escuelas Normales pueden constar de un Director, dos profesores y los 
empleados subalternos que se crea necesario, y se las proveerá de alumnos 
escogiendo dos de cada sexo en cada departamento, entre los mas idóneos por 
conducta, edad, salud, robustez é inteligencia, y enviándolos á ellos en calidad 
de alumnos internos. Se hará cargo del desempeño de esta comisión a los Jefes 
departamentales, á los cuales se les ordenará que por ningun motivo procedan